• El aislamiento y el no poder interactuar con pequeños de su misma edad, ha afectado el estado emocional de los infantes: PS. Alma Sonia Rodríguez Peregrino.
Apatzingán, Mich., a 17 de julio de 2020.- Nos encontramos viviendo una situación nunca antes vista, que nos afecta porque hemos tenido que modificar la vida misma y ahora enfrentamos “perdidas”, que van desde las conexiones sociales hasta las pérdidas humanas y con ello enfrentamos un “duelo” en el que un sector duramente afectado de forma psicológica, es el infantil.
La Psicóloga Alma Sonia Rodríguez Peregrino explico, que durante la pandemia por COVID-19, los adultos han tenido que modificar su comportamiento, pero se han mantenido activos con ciertas restricciones, pero los niños y adolescentes han tenido que enfrentar una etapa de mayores restricciones aun, ¿porque?, porque desde el inicio de la pandemia se quedaron sin la posibilidad de interactuar con pequeños de su misma edad, sin acudir al colegio, sin poder salir a jugar al aire libre, por el riesgo que ello representa para su salud, lo que ha llegado a afectar el estado emocional de los niños.
Es por ello que hoy, una de muchas preocupaciones de los padres ante la emergencia sanitaria, no es solo el que los menores puedan resultar infectados, sino también la cantidad de noticias e imágenes recibidas a través de los diferentes medios de comunicación, que pueden llegar a tener un gran impacto en nuestros pequeños, pues lamentablemente la mayor parte del tiempo los niños se encuentran frente a un televisor o un móvil y son ellos los más susceptibles a recibir información no adecuada, por el aislamiento que han estado viviendo, desde que el gobierno determino suspender las actividades educativas en las escuelas.
La profesionista detalló, que algunos de los cambios que podemos observar en los pequeños son además de la ansiedad, irritabilidad, desobediencia, berrinches, excesos en ver televisión y utilizar el móvil y algo importante es que se han permitido dormir hasta altas horas de la noche, lo que indiscutiblemente esto no es sano para la salud de la niñez.
Recomendó entonces, que para modificar estas conductas que son el resultado de la pandemia es preciso fortalecer la relación padres e hijos, participar en juegos familiares, manualidades, fomentar el gusto por la música, la lectura y otras actividades a través de las cuales el impacto psicológico por la pandemia pueda ser menor en los niños.
Finalmente, la Psicóloga recordó “en estos momentos el mundo está unido en una batalla contra un enemigo silencioso, sin embargo, estamos dejando de lado las graves consecuencias a las que tendremos que hacer frente después de la pandemia y esto también lo podemos modificar desde ahora, teniendo pequeños cambios de actitud”.
