Lo que se recuerda cada 8 de marzo es la matanza por parte de la Policía de 120 mujeres trabajadoras de una fábrica textil en Nueva York que marcharon por defender sus derechos.
La historia se remonta a hace más de 100 años, concretamente el 8 de marzo de 1875, cuando cientos de mujeres trabajadoras de una fábrica de textiles de Nueva York marcharon por las calles contra los bajos salarios, menos de la mitad de lo que cobraban los hombres.
Esa jornada terminó con 120 mujeres muertas por la brutalidad policial y provocó que las trabajadoras fundaran el primer sindicato femenino.
En sus inicios, finales del siglo XVIII y principios del XIX, el movimiento obrero mantenía una posición tradicional de corte patriarcal en relación con la igualdad de la mujer y sus reivindicaciones.
Será a mediados del siglo XIX cuando los movimientos reivindicativos de la mujer tomen fuerza: lucha por el sufragio femenino, la reivindicación de la igualdad, la denuncia de la opresión social, familiar y laboral. Surgieron entonces los denominados movimientos sufragistas.
No fue hasta 1909 cuando se celebró por primera vez el Día de las Mujeres Socialistas en EEUU, un 28 de febrero. En 1910, y la II Conferencia Internacional de Mujeres Socialistas estableció el 8 de marzo como Día Internacional de la Mujer Trabajadora.
Pero los cambios reales estaban lejos de lograrse. El 25 de marzo de 1911, tuvo lugar nuevamente uno de los mayores desastres de la industria en Estados Unidos. 146 personas murieron en un gran incendio de una fábrica textil a causa de derrumbes, quemaduras e intoxicación por humo y otras se suicidaron al no tener escapatoria.
El incendio de la fábrica de confección de camisas Triangle Waist Co. de Nueva York el 25 de marzo de 1911 fue el desastre industrial con más victimas mortales en la historia de la ciudad de Nueva York y el cuarto en el número de muertes de un siniestro industrial en la historia de los Estados Unidos.
El fuego causó la muerte de 123 trabajadoras de la confección y 23 hombres que murieron por quemaduras provocadas por el fuego, la inhalación de humo, o por derrumbes.
La mayoría de las víctimas eran mujeres jóvenes inmigrantes de Europa del Este e Italia de entre catorce y veintitrés años de edad. La víctima de más edad tenía 48 años y la más joven 14 años.
Los responsables de esas muertes fueron junto con la policía que provocó el incendio, los propietarios de la fábrica Triangle Shirtwaist, que habían sellado las puertas de las escaleras y de la salidas para evitar que las empleadas robaran.
Esta terrible tragedia trajo importantes cambios en la legislación laboral y provocó el nacimiento del Sindicato Internacional de Mujeres Trabajadoras Textiles.
Fue la alemana Clara Zetkin en 1910, durante el Congreso Internacional de Mujeres Socialista, la que propuso que se estableciera el 8 de marzo como Día Internacional de la Mujer, en homenaje a todas las que llevaron a cabo las primeras acciones como mujeres trabajadoras organizadas contra la explotación capitalista.
Por esto hoy, como cada ocho de marzo desde 1911 se celebra el Día Internacional de la Mujer.